El mejor post es el que nunca será escrito…

Si los periodistas tan solo fuéramos contadores de historias que tienen como fin entretener a la audiencia, hacerles sentir seguros en una sociedad «civilizada», sin falsas alarmas y sin catástrofes que recalcar cada día, repetidas una y otra vez…

Si los responsables de los medios de comunicación tan sólo fueran cuentacuentos para hacer reír a un niño que está sentado frente al televisor. Un payaso sale a la palestra y te cuenta la anécdota del día, hace parodia política, económica y social y se despide con una sonrisa. Se quita la nariz y te dice «hasta mañana» antes de irte a la cama.

Si la realidad pudiera observarse sólo desde un haz de luz, un color determinado, un cristal transparente. ¡Qué fácil sería todo! Alcanzas a acertar algunos datos, los coloreas con nombres, pintas el cuadro del crimen con premura y ala a publicar, a sacarlo a la luz para airearlo, para que sea observado por todos, para que quede siempre por escrito. Dan igual las consecuencias.  Lo tengo, está firmado por mí y lo comparto porque es mi deber, mi trabajo o simplemente porque me apetece. News, news!

Se echa de menos pensar en las víctimas que una publicación falsa pudiera originar, en el respeto a la fuente, en el respeto a la totalidad de un hecho que puede ser gravemente tergiversado, en el respeto a una verdad mucho más profunda, incluso en el respeto al protagonista de una historia que ha sido demonizado por los media.

Facts with comments; hechos y opiniones, o ambos agitados. Buenos y malos, in extremis; blanco o negro, sin escalas de grises. Apuntamos con el dedo y disparamos. Es simple. La ignoracia, mata, decía Unamuno, pero las medias tintas, en numerosas ocasiones, también.

La mejor historia es la que nunca será escrita, precisamente, aquella que más necesidad tiene de ser escuchada y que puede ser una herida que no cicatriza porque no puede ser arrebatada por la luz. A veces la verdad es tan poderosa que destruye, que se balancea como arma arrojadiza sobre quien la posee. Se cierne peligrosa.

El daño a la imagen, el derecho al honor y a la intimidad con un solo click de ratón, con una difamación, con el anhelo de obtener una medallita en el trabajo o simplemente por adquirir notoriedad entre colegas. Sí, fui yo quien destapó a Harry, el que destruyó su carrera profesional, aquel que deslizó la caja de Pandora al escenario de la Opinión Pública.

Hoy no puedo contar la historia que quisiera…

Muchas de las mejores historias estarán lacradas en silencio; precisamente aquella que aún te tiene el corazón en vilo, de la que desearías hacer justicia para clamar a diestro y siniestro que fue mentira.

Acerca de Boots, Horns & Books

Spanish girl living her own american adventure in Texas
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2 respuestas a El mejor post es el que nunca será escrito…

  1. Adolfo dijo:

    ¿Sabes que con tu bolg fomentas vocaciones? Creo que voy a ponerme manos a la obra ya mismo, no sé si recuperaré el de «oposita que algo queda» en colaboración con Jesús Gómez Troyano, o crearé uno nuevo, el caso es escribir, y compartir lo que se escribe, no dejarlo en cincelados cuadernos a pluma que nadie leerá.
    Mucho ánimo y un abrazo

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